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CHISPAZOS
TINIEBLAS. - En Nochevieja,
cinco de mis nietos la disfrutaron en casa. Por su culpa discutí con mi mujer:
ella no quería que jugaran a las tinieblas en el cuarto de estar porque -dijo-
los armarios están llenos de ropa y los niños se esconden en ellos. Así es,
desde luego, pero ¿dónde, si no, habrían de esconderse para disfrutar de tan
divertido juego? Lo cierto es que, en mi niñez, jamás disfruté tanto como
jugando a las tinieblas, con mis hermanos y primos, en casa de mi abuelo. Éste,
estricto y severo como él solo, jamás nos impidió practicar ese juego; no sé si
debido a que no nos prestaba demasiada atención o a que, dejando al margen su
estricta disciplina, hizo de ello excepción. Feliz con las tinieblas de mi
infancia, hoy, también feliz, se las permito a mis nietos.
REAL MURCIA. - Demasiados
partidos televisados en fin de semana y todos en directo. Yo que creí ser un
gran aficionado hago ejercicio de zapping por todos ellos y solo de vez en
cuando paro si sale el Madrid, el Barcelona o si del partido se anuncia
emoción. Debe ser que, en realidad, no me gusta el fútbol. Y, sin embargo,
cuando televisan un partido de mi equipo, mi único equipo favorito, espero la
hora con impaciencia para conectar el televisor. Lo tomo como asunto
prioritario. Ayer, lejos de visionar la final del Campeonato del Mundo de Clubs
que ganó el R Madrid, no perdí detalle del partido de Segunda B que disputaba
el R Murcia, ¡suerte que ganó! No sé si esto es pueblerino o es sentimiento. O
quizá que no me gusta el Fútbol y solo quiero que gane mi equipo.
CEREZAS. - Como lo que es
otoño en el hemisferio norte es primavera en el del sur, si de catar cerezas se
trata, resulta que en estos días de inmediato advenimiento del invierno en
España debemos recurrir a lo que nos manden de Chile, país recio en exportación
de cerezas. Los chinos, esos tan comunistas como espabilados capitalistas, se
han venido arriba en cuestión de esta fruta: hasta 35 $/kilo llegan a pagar al
país de los nitratos y de las almejas enlatadas. Son mejores clientes que los
españoles. Así se entiende que el disparatado precio a que están en nuestras
fruterías patrias, ¡nada menos que 26 euros/kilo!, sea para los chilenos y sus
mapuches, precio de segunda división. Las cerezas primaverales del sur del
planeta, tan riquísimas, pese a su precio en España, tienen a los chinos por
campeones.
CADA CUAL. - Amancio Ortega
y Pablo Iglesias deberían estar de acuerdo en eso de que el Estado debe
procurar trabajo a los españoles y que estos, en su conjunto, tienen derecho a
una eficiente sanidad, una educación solvente y un universal acceso a
prestaciones sociales de necesidad prioritaria. Mientras que el Sr. Ortega hace
lo suyo: creación de decenas de miles de puestos de trabajo y pago de impuestos
al Estado por valor de miles de millones de euros, cabe preguntarse qué sería
capaz de lograr el Sr. Iglesias con sus propuestas políticas anti-casta y el
aliento feroz que de las masas justamente indignadas hace gala, si por lo que
fuera, este rico que lo es, el Sr. Ortega, deviniera en vagancia productiva y
dejara con cargo al Sr. Iglesias todo su emprendimiento. En el viento, a lo
Dylan, queda la respuesta.
ABDERRAMÁN II. - Que los
musulmanes, árabes, moros, lo que fueren, escogieran la vega Murcia para
instalarse tiene mucho que ver con 'el efecto Nilo' que el Segura suponía para
ellos pues las repetidas inundaciones mejoraban el manto orgánico de los
huertos colindantes. Pero hoy resultaría improcedente dejar hacer al río lo que
es capaz de hacer. Porque si así fuera, deberíamos haber recomendado a
Abderramán II, en 825, que se instalara en el monte, al abrigo de la Cresta del
Gallo. De otro lado, de no haberse ejecutado el Plan de Defensa contra las
Avenidas -José Bautista, autor- hoy hubiésemos tenido que salir pitando a remo
los murcianos, pues sin duda, el caudal del Segura a su paso por el Puente de
los Peligros hubiera superado la cantidad de 400 m3/seg. Lo que hasta ese
límite se garantiza con el Plan.
ARCO DE TRAJANO. - Deberíamos
ponernos todos de acuerdo de una vez por todas respecto a que insistir en
posturas radicales que lleven a la clausura del Trasvase Tajo-Segura es tarea
de locos. Es tanto lo que depende del Acueducto que su desaparición llevaría
consigo una verdadera tragedia nacional. El jueguecito que se trae entre manos
Podemos es, además de una resistencia ideológica contumaz al Desarrollo, un
arma letal contra los intereses de todos los ciudadanos, toda una gran
irresponsabilidad. La reciente historia en Extremadura de Podemos (Irene de
Miguel), con apoyo del PSOE (Eduardo Béjar) queriendo pasarse el Memorandum por
‘el arco de Trajano’ es una muestra más de falta de escrúpulos y de respeto a
cientos de familias que dependen del TTS y, por demás, al socialista Fernández
Varas, excepción honrosa de un PSOE que cae en barrena, víctima de sus
desaciertos.
MANEJO. - Sé que ellos, los
de Podemos, no creen en el pluralismo político sino en la existencia de grupos
homogéneos que luchan por el poder y polarizan la sociedad. Esto es, los buenos
-nosotros- y los malos -ellos-. Así ven las cosas. El bastimento político que
Podemos -los buenos- emplea certeramente como munición tiene que ver con su
habilidad para poner nombre al malestar que provocan a la ciudadanía los otros
(los malos): apoderarse de la bandera de la indignación y el manejo de ésta
como motor de su activismo político. Y muestran diferentes formas de entender
la realidad con retóricas referencias, llanas y simples, como la casta, lo
viejo y lo nuevo, los ricos y los pobres. En definitiva, la orientación
populista que pretende cambiar el mundo pero que su incapacidad para hacerlo
supera la de quienes denuestan en el empeño.
CAMPEÓN. - Monedero
presumía: "no hay nadie más transparente que nosotros" antes de
responder que “los informes estratégicos para instituciones no los puede ver
nadie” al ser interpelado acerca del contenido de ese trabajo realizado para
Venezuela y otros estados sudamericanos por el que cobró los famosos 425.000
euros. Reconozco que siempre me sentí muy interesado por conocer las maravillas
de ese trabajo, porque muy bueno habría de ser para merecer ese pastón
liquidado. Pues bien, ya sé de qué iba el asunto tratado: de un objetivo
análisis y posterior propuesta acerca de la posibilidad de establecer una
moneda común en los países bolivarianos. ¿La retirada de los billetes de 100
bolívares era una de aquellas propuestas? (Por cierto, con el 10% de esa cantidad
se podría contratar todo un Plan Director del Transporte para nuestra Región)
¡Monedero, campeón!
OTTIAAHH. - Muchos tienen
como latiguillo decir ‘ottiaahh’ y quedan fatal. Algunos, cuando llegan a casa
con los bastimentos acarreados en el hipermercado de turno, dejando en el suelo
los paquetes, dicen “¡Ottiaahh!” en lugar de ¡Uff! En partido de alevines, el
goleador, tras hacer gol va al centro del campo y arenga a sus compañeros:
“¡Con güevos, ottiaahh!”. La mamá, en la grada: “¡Ottipiti, qué gol!”. Un
enfermero, de los de antes, rechaza la estampita de la Virgen que una paciente
le ofrece diciendo: “Abuela, no creo en estas cosas, ¡ottiaahh!”. Niñas de doce
o trece años en un partido de cadetes al rubio de pelo largo “has metío un gol
de la ottiaahh”. Pero algunos saben enmendarse y cuando se les viene “¡la
ottiaahh!” rectifican: “¡La ott...tica Belo y Lux!”. Para ellos, mi admiración
en su lucha por no ser ordinarios.
CADA 50 AÑOS. - Hace 100
años (bueno, 99) fueron Lev Davidovich, Vladimir Ilich y Josif Vissarionvich (y
no el Carcelero de Odessa, ni el Obi ni el Yeniséi, ni siquiera el Lena, ni
Lenin y, desde luego, ni Stalin, por mucho que la Historia así nos los
muestre). Más tarde -hace 50- aparecieron Clint Eastwood, Eli Wallach y Lee Va
Cliff. Que ahora Iñigo Errejón, Pablo Echenique y Pablo Manuel Iglesias vengan
a cuento, nos permitiría interpretar que la vida, con sus idas y venidas, se
nos muestra cíclica con determinada contumacia, y que la historia de El Bueno,
el Feo y el Malo, de reproducirse cada 50 años, nos demuestra que éste nuestro
Mundo, pese a su anchura y complejidad, se nos presenta de manera muy simple.
Renunciar a sacar conclusiones de ello, no sería cosa de gran inteligencia.
LLUVIA. - Final del Año
Ordinario -el Hidrológico lo fue el 30 de septiembre- de resultado
catastrófico. Peor que en los dos años anteriores, 2014 y 2015, y peor que en
la media de los últimos diez años. No solo es que nunca llueve a gusto de
todos; es que no llueve a gusto de nadie. La evidencia climática que demuestra
la constancia de una determinada lluvia a lo largo de un periodo de años
suficientemente largo, lo semiconstante de ese dato en el medio plazo, no
sirven de consuelo hídrico para sufrir la miseria de la variabilidad de la
lluvia en periodos cortos. Y es que si nuestras edades tuvieran las dimensiones
correspondientes a las que permiten milagros geológicos, ahora no estaría yo
dando la murga con mi lamento pluviométrico. Nuestros embalses apenas superan el
50% de su capacidad.
UN EURO. - Entre ‘no matar
al mensajero’ y ‘no hables mal de tu caballo, si pretendes venderlo’ hay un
intelectual recorrido. Con el problema del Mar Menor deberíamos llevar sumo
cuidado. Menos publicidad y más ponerse manos a la obra. Entiendo que es esto
lo que el Gobierno pretende. Por en medio, el PSOE (ya voceó lo suyo en
Bruselas) resuelve poner una enmienda a los Presupuestos Regionales, sin
actuación concreta y valorada en 1 euro (¡¡). Mientras, el arrojo ‘verde que te
quiero verde’ de los entusiastas de Podemos cambian el mote de una partida ya
presupuestada y la convierten en enmienda. Veremos si, al final, Podemos logra
lo que parece una pretensión: convertirse en la oficina técnica del Mar Menor y
dejar con un palmo de narices a quienes también tienen su corazoncito y
conocimiento científico.
2017. - Para todos, los de
mi izquierda y los de mi derecha, los de ciencias y los de letras, los que van
al monte y los que a la playa, los creyentes y los gentiles, los que me quieren
y los que ya no, mis hermanos, mi mujer y mis hijos, mis amigos y quienes no lo
son, mis conocidos y quienes desconozco, quienes hicieron los Primeros Viernes
y los que no, los ingenieros de caminos y los que no lo son, los que leyeron
cuentos de Calleja y los que leyeron a Lafuente Estefanía, los que, de niños,
jugaron a las tinieblas y los que no pudieron jugar, los mayores y los jóvenes,
aquellas mujeres a las que amé, los fantasmas que pueblan mis imaginarios
castillos, todas mis asignaturas pendientes, Parménides y Heráclito… y el mundo
mundial, Feliz 2017.
MUJERES. - Seguimos igual.
Aquellos países de Europa que cayeron del lado de la Reforma en el siglo XVI,
inducidos por los Lutero, Calvino, Melanchon, Zwiglio y
otros, nos siguen llevando ventaja a cuenta de la Fe. En España caímos en el
lado ‘malo’ de la lucha entre católicos y protestantes. El Emperador Carlos del
Sacro Imperio y Rey de España, se tomó muy en serio lo de defender el
catolicismo. Los protestantes, más laxos, se las vieron con ventaja en eso de
no tratar como usura préstamos dinerarios que los llevarían rápidamente a la
riqueza. Para los católicos eso era pecado. Hoy, mientras los católicos les
damos vuelta a si las mujeres deben llegar al sacerdocio, la Iglesia Anglicana
ha resuelto el problema: hay más ordenaciones de mujeres que de hombres. Aunque
la mitad de ellas no cree en la Resurrección (¿).
HUMOR. - Reflexiona nuestro
filósofo e historiador Rafael Núñez Florencio acerca del Humor. Tomando de
Mafalda su afortunada frase: ‘¡si uno no se apura a cambiar el mundo, después
es el mundo el que lo cambia a uno!, llega a ésta de Forges: ‘nos creíamos que
íbamos a cambiar el mundo, y casi no podemos cambiar ni de compañía de móvil ‘.
Muestra así el reconocimiento explícito de lo difícil que resultaría cambiar el
mundo y mucho más si tal pretensión tiene como argumento el humor, tan
maleable. Sin embargo, es evidente que el mundo cambia; incluso a nuestro pesar
y el de quienes presumen de inmovilistas hemos de rendirnos ante tal evidencia.
El humor, en todo caso, siempre resultará útil como último recurso y, no solo
eso, sino que ayudaría a que nuestra mirada al mundo fuera más crítica.
DINERO. - Tres cosas dicen
que hay en la vida, salud, dinero y amor. Colocamos el dinero en tercera
posición, pero hay opiniones en contra. Ya el Arcipreste de Hita (‘comprarás el
Paraíso, ganarás la Salvación’) y, con algo de coña, Quevedo (‘poderoso
caballero es don Dinero’), nos lo advierten.
Al objeto de compadecer opiniones de unos y otros, Woody Allen sentencia
que ‘el dinero no da la felicidad, pero produce una sensación tan parecida que
es muy difícil discernirla’. A fin de cuentas, y recurriendo -por reducción- al
absurdo, si careces de dinero, ¿cómo recuperar la salud o cómo hacer que te
profesen amor con naturalidad? Difícil circunstancia, desde luego.
(Debería seguir con esta
cuestión material como es la ‘pasta’: ¡es tan difícil componer un pensamiento
sometido al rigor de 140 palabras como máximo!)
Y, sigo…
Algo habría de modificarse
en el mensaje de aquella canción argentina compuesta por Rodolfo Sciammarella y
que en España tanto éxito tuvo, sobre todo con cargo a la cantante catalana
Cristina Stop, ‘Tres cosas hay en la Vida’. Sí, porque resulta de tal evidencia
que hoy, atizados por publicidades tan agresivas y noticias sobre auténticos
pelotazos, sólo con dinero se puede comprar el amor (véanse revistas del
corazón, telebasura ordinaria u otras menudencias) y procurarse la cura de
cualquier enfermedad. Pero lo más grande del asunto es que estamos convencidos
de que sólo con dinero es posible conseguir más dinero. Estamos siendo
empujados para dar la vuelta a lo bonito que era despreciar el dinero como
muestra de culto a la salud y el amor. Tal y como auténticos pardillos, así
pensábamos ayer. Hoy, la cosa es bien diferente.
Entre Quevedo con su
‘poderoso caballero don Dinero’, y el Arcipreste de Hita con el Libro sobre El
Buen Amor, forjaron cierta parte del repertorio de Paco Ibáñez, esa voz
quebrada, cercana y firme que, como altavoz anti franquista, se constituyó,
desde Francia, en una pancarta contra la Dictadura, en la década de los
‘Sesenta’. Ibáñez incluyó en su repertorio la poesía española más
‘interpretable’ desde la oposición política. Hoy, por mucho que hubiera de
extrañar, el cantante que puso voz a los aceituneros más altivos de Jaén,
todavía cuenta con un montón de admiradores en el Sur de la Francia. Y lo más
sorprendente del caso es que su popularidad tiene su base en las mismas letras
que hicieron de sus canciones objeto de culto a la juventud de los años sesenta
del pasado siglo.
MENOS PARO. - Conocido el
dato del Paro en noviembre del pasado año 2016, hagamos un pequeño cálculo a
fin de obtener una conclusión cardinal y objetiva del asunto que más preocupa a
los españoles. Con datos del tercer trimestre de cada año, en 2011 el Paro era
del 22,6%, llegando a un máximo, en 2012, del 25.8%. En 2016, el Paro baja
hasta el 17,8%. En cifras reales, durante el último quinquenio se han creado un
millón cien mil nuevos empleos. Cifra que, pese a su bondad política evidente,
demuestra lo arduo y sacrificado que resulta salir de una Crisis económica como
la que sufrimos y de la pesada carga que el PSOE dejó tras el penoso gobierno
de Zapatero. Claro que los indignados de Podemos, con sus políticas tan de
calle normal populistas, aún lo hubieran hecho peor ¿O no?
LA SUPERFICIE DEL CIELO. - Dando
por supuesto que lo del Infierno es una patraña, pues de haber algo sería un
Cielo espléndido, como jubilado que soy me pregunto cómo de grande habría de
ser éste a fin de acoger a toda la población mundial habida hasta este momento.
En el Blog ‘La Caja de Schrödinger’ se calcula que esa población debería ser de
unos 150.000 millones de personas. De acuerdo con una edificabilidad arbitraria
- ¡pero sostenible! - de 0,17 m2/m2 (la de Cabo Cope); viviendas de 100 m2 y 4
habitantes, el espacio necesario para albergar a esa gente sería de unos 22
millones de km2. El Cielo, de momento, tendría la misma superficie que América
del Norte (Canadá, EEUU y México), pero como el Universo se expande, el Cielo
también lo hará y podremos entrar, en un futuro sostenible, todos los
pecadores.
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