1.- Extrañarse del subidón de Podemos
carece de sentido. Tal y como estaban (y están, aun) las cosas en España lo
normal es eso. Desahucios, Paro exagerado y la Casa del Bienestar en cimientos
(sólidos cimientos, por cierto) justifican a Podemos. Eso sí, lo que viene con ellos no es esperanza. Sí, por el
contrario, es venganza, y de la buena. Podrán sus elegidos viajar en autobús,
volar en Ryanair, comer tortilla de patatas y beber cocacolas a medias, pero
arreglar a España, lo que se dice arreglar, eso ni soñando. Si al PSOE le
perjudica Podemos, a España le vendrá peor una izquierda que no sea el PSOE. Y,
en fin, nos pongamos como nos pongamos: ¡Hay que pagar la Deuda, coño!
2.- Pablo Iglesias –el que dice que
Podemos, no el bueno- compara a los activistas del Gamonal –a los incendiarios,
no a los buenos- con los héroes madrileños que el Dos de Mayo se enfrentaron al
francés. Y yo digo que esta analogía es todo un ánimo encendido para quienes
son capaces de enmarañar hasta el desconcierto las manifestaciones públicas
convocadas a fin de reivindicar justas aspiraciones. Vamos, toda una incitación
a la violencia: justificar, en tal caso, equivale a actuar en consecuencia. Y
aquí viene mi duda, ¿quién es el malo, don Pablo diciendo lo que dice, o yo,
apostillando lo que apostillo? Qué duda tan cruel!
3.- Que los partidos políticos que
alternan en el poder han de ‘hacérselo mirar’ vistas las cosas de las Europeas
es, sin duda, indiscutible. Pero que el cambio se tenga que producir a base de
asambleas callejeras y decisiones colegiadas donde prime el culto a la
demagogia (mejor, Demagogia con mayúsculas) produce una buena porción de
inseguridad (acojonamiento). A ver cómo jubilamos al personal a los sesenta
años y a ver a qué salario. Fácil decirlo e insensato proponerlo. Y menos mal
que a Leguina, en categoría, no le llego a la suela de su zapato, pues de lo
contrario, afirmando como él afirma que todo es demagogia, me podría caer
encima un aluvión de imprecaciones democráticas
por parte de los que dicen que sí PUEDEN. Como a él.
3 comentarios:
Yo no doy mi voto al PP, partido que nos hace retroceder en derechos sociales al ritmo que le marca la COE; ni creo en los Mundos de Yupi y Pablo Iglesias. Pero entre los de POKEMON y los de PODEMOS me quedo con los últimos.
Ya sabes, los de PODEMOS han puesto, de la canción triste que nos canta la crisis, la Letra, pero no han dado con la Música, o lo que es lo mismo, con los Números que justifican su oferta electoral.
Estoy de acuerdo con usted señor, añado, si es que añado algo, que son un partido más de izquierdas y son más de los mismo, con diferencias en algunos aspectos pero más de lo mismo.
LM
Saludos
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