Agresión indisimulada al matrimonio. Ponga usted un circo, con sus payasos, domadores, tigres y leones, enanitos...Hágase director de circo, circule por esos pueblos de Dios; viva en medio de olorosos efluvios provenientes de un montón de animales, contrate a una taquillera, a la mujer barbuda, el hobre elefante, manostijeras, ciento diez diputados etc.. Y eso es más barato que casarse.
Sin embargo prefiero el matrimonio, aunque la mujer siempre, siempre, tenga razón.
(UN TITULAR QUE MERECE SER SUPLENTE)
1 comentario:
Yo creo que la cuestión no está tanto en lo que cuesta casarse, sino en el tiempo necesario subsiguiente para rentabilizar la inversión. Teniendo en cuenta, por supuesto, que la esposa siempre tiene la razón.
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