Abstenganse desarrollistas desconsiderados y ecologistas apocalípticos de tomar en consideración las tres propuestas de acción que la comunidad ciudadana necesita. El resto, radicales varios, estudiosos afanados, ignorantes, filósofos, creyentes y gentiles, aragoneses, políticos responsables, politicos del tres al cuarto, profesores y maestros, rubios, altos, morenos, catalanes independientes y no, manchegos, murcianos de dinamita, laicos y monjes, apasionados, nerviosos, epicúreos, cínicos y socráticos, hasta los hilemorfistas y el resto del universo mundo, sean amables y mediten sobre este asunto.
Tres notas me inquietan hasta tal momento en que se hubieran hecho realidad. Estas, todas ellas como defensa ante las perversas emisiones de CO2 que es un hecho real a combatir (por cierto,otra cosa es sacar de quicio el asunto anunciando la apocalipsis ecológica mediante la fijación de año y día, lo que es una estupidez a la vista de la unidad de tiempo geológica).
Nota A. La causa de las tragedias más frecuentes en el mundo tiene su origen en el Agua, con sus terribles inundaciones y sus severas sequías. Es obligado auxiliar al Mundo mediante la REGULACIÓN de sus ríos (nada de canales de agua, ríos). Esta protección nos lleva a una segunda ventaja: el aumento de las posibilidades de la energía hidroeléctrica, tan renovable y tan exenta de emisiones odiosas.
Nota B. Muy malo lo de los GEIs, y más el CO2 (se ha dicho), por eso nada mejor que producir energía sin emisiones:¡la Nuclear! Cero patatero en eso y, fuera miedos, aprovechar que, dado lo profundo de su peligro, cuenta con la tecnología más segura del momento. Aquí, otro corolario o ventaja inducida: Dejaríamos de depender del petróleo árabe, del gas del Magreb, o de Rusia y tal. Así que con esta independencia nos despreocuparía (algo) de países que son como poco estables en la cosa política.
Nota C. La Agricultura puede dibujarse muy bien como un sumidero de CO2, ¿no es estupendo? Por eso deberíamos conseguir una agricultura que además de ser rentable y productiva (nada de subvenciones, ni al coste ni a la producción) se convirtiera en un depósito de dióxido de carbono, cuestión ya digo de nivel muy relevante. Como consecuencia necesaria de ello, se aplicarían las técnicas (muchas de talante español) adquiridas en las buenas prácticas de riego, eligiendo las mejores zonas de mayor adaptación climática y allí se llevaría el agua necesaria, reinventando un nuevo concepto: lo que se hubo llamado, ayer, trasvase.
Esto es todo, y todo sea por nuestra querida Naturaleza a fin de que ella preste sus incalculables servicios al hombre.
1 comentario:
"Murcianos de dinamita frugalmente propagada...".
Es poco conocido que todas las razzias del gobierno israelí persiguen el control de las fuentes de agua dulce de la zona.
El agua es un bien estratégico, incluso más que el autoabastecimiento alimentario.
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