CHISPAZOS TREINTA Y CUATRO
WOODY
ALLEN. - Cuando un cinéfilo se declara admirador de Woody Allen, todas sus
películas le gustan. No hay malas; unas son mejores o peores que otras, pero en
su conjunto lo que se aprecia es la coherencia, el modo de enfocar los asuntos
y la puesta en escena de diálogos que desvelan (artísticamente) las obsesiones
del autor, siempre de manera sistemática. Resulta cómodo seguir la trayectoria
de Allen pues se concreta en una película por año: hay, pues, tiempo para
digerir su discurso. Discurso que tiene que ver, siempre, con la frustración
sexual, la muerte, la mecánica cuántica, los judíos, las nulas evidencias de
Dios etc. La de este año, Café y Sociedad, cómo no, es portadora de tales
obsesiones. Con todo, si de destacar un film de Allen se tratara, lo haría con
Blue Jasmine. Igual la veo por quinta vez.
ZEROLO.
- Repaso la biografía de Vázquez de Mella, periodista, diputado en Cortes,
germanófilo y carlista, a fin de encontrar en su vida elementos canallas que
hicieran de él un transgresor moral de la dignidad de los españoles. Una
actitud franquista, en definitiva. Y no veo nada de eso pues murió en 1928,
once años antes del comienzo del franquismo. No sé si la sustitución de su
nombre por la de Zerolo en una céntrica plaza de Madrid tiene que ver o no con
los considerandos de la Memoria Histórica o con la deliberada intención de
sustituir la memoria de un político católico por la del apóstol de los
homosexuales. No lo sé, lo que sí sé es que la plaza de Vázquez de Mella, para
mí, le viene demasiado grande a Zerolo. A ver si somos capaces de equilibramos
algún día.
MEMORIA.
- Lo que era objetivo de la Ley de Memoria Histórica, reparación moral y
recuperación de la memoria familiar de los vencidos en la Guerra Civil y
maltratados por la Dictadura, en la práctica se ha convertido en una vendetta
que en nada favorece ni la cohesión ni la solidaridad entre españoles. So
pretexto de suprimir ‘elementos de división’ se están cometiendo acciones
irresponsables, no ya la de sustituir ‘malos por supuestos buenos’ sino la de
borrar elementos que explican la Historia de España. Un poco más y la cambiamos,
hacemos otra. Millán Astray, franquista pese a que fundó la Legión, y
Bastarreche, franquista, aunque puso en órbita a la MCT, son dos ejemplos cuya
defenestración suponen una auténtica maniobra manipuladora de nuestra real
Historia. Y hay un montón de casos más, por descontado.
VIEJO
IDIOTA. - “Mancha, y mancha vergonzosa, porque no vale que un pueblo tenga
poetas, pintores, teólogos y guerreros, si no tiene filósofos ni geómetras, ni
hombres que se dirijan a la razón, la eduquen, la fortifiquen y la eleven”.
Así, de esta manera tan rotunda, expresaba Echegaray su lastimero sentimiento respecto
a la pobreza científica que asoló España durante más de dos siglos en el
momento en que este insigne ingeniero de caminos, político y Premio Nobel de
Literatura ingresó (1886) en la Academia de las Ciencias. "Aquí yace el
siglo XIX" escribió Mariano de Cavia a su muerte. Fue estúpidamente odiado
y denostado por la acientífica Generación del 98: “viejo idiota” le llamaron
(hay que ser muy ignorantes para haberlo tomado por tal). De Echegaray, cuya
juventud pasó en Murcia, se cumple este año el centenario de su muerte.
EL
98. - Ni un reparo tengo para decir que, por lo general y dentro sus enormes
talentos literarios, la mayoría de los escritores de la Generación del 98 eran
unos auténticos gilipuertas, engreídos y fatuos, receptores de esa horrible
herencia que, para España, fue el mal llamado Siglo de Oro, que hizo de los
españoles unos perfectos tuercebotas respecto a la Ciencia. El siglo XVIII que
para los franceses y sus ilustrados fue el Siglo de las Luces, para España fue
el de la siniestra Ignorancia, tanto que el Padre Feijoo -que por algo no fue
santo- clamó por ‘una cruzada moral contra la Ignorancia’. Solo los
afrancesados y los ingenieros de caminos fueron capaces de acotar el retraso
científico de nuestra pobre España durante el siglo XIX. Que los del 98 se
descojonaran de Echegaray, a mí me produce mayor descojonación.
FANTASMA.
- El Debate de Investidura, como expresión literal de un diálogo de sordos, ha
resultado ser una partida -entre partidos- donde las cartas estaban marcadas.
Ya me comentará alguien si tiene sentido obligar a un candidato presentarse
para decirle que no. Esto ha sido, desde luego, un verdadero enfrentamiento de
grupos opuestos a quienes para nada han importado sus argumentos. Vista la
exposición de Pedro Sánchez no hay duda de que vamos a otras elecciones, a
menos que se produzca un acuerdo entre PSOE, Podemos e independentistas, que
todo es posible. De ser así, de que nos veamos las caras en diciembre, Sánchez
podría ser la imagen fiel del auténtico fantasma. Ha estado muy bien Rajoy, los
rostros de fastidio de los opositores ante su discurso resultan tan patentes
como oscuros sus argumentos.
MUNDO.
- Le he dado una vuelta este verano, entre playa y playa, al horror de este
mundo en donde la mayoría de sus hombres y mujeres son muy desgraciados. Unos
menos y otros, un montón de sufrimiento. El mejor de los mundos posibles -no el
mejor- sustenta el pensamiento de Leibniz, último hombre universal en cuanto de
abarcar todo el conocimiento se supone. Si, en efecto, éste es el mejor de
todos los posibles, miedo dar imaginar cómo (y su porqué) serían los
descartados. Un mundo cuyos habitantes tienen que matar para comer (y aun por
odio y avaricia) no puede ser distinguido siquiera como posible. Un mundo donde
la vida tiene como común denominador de personas, animales y cosas, la muerte,
no resulta agradable. Si de mí dependiera, yo inventaría, fácil, un mundo mejor.
Y cualquiera.
MODERADOS
O NO. - A los de Derechas, seamos o no moderados, los de la Izquierda,
moderados o no, tarde o temprano terminan poniéndonos a Franco como recurrente
argumento. Claro que nosotros – los de
Derechas, moderados o no- no nos quedamos atrás y a los de la izquierda -no
moderados- les echamos en cara el rollo de Venezuela. Tales argumentos, desde
luego, no son precisamente de exquisita enjundia, pero si de matizar se trata,
lo de Venezuela goza de actualidad según las crónicas que nos dan cuenta de
asesores a sueldo de ‘podemitas’ españoles en tal país. En lo de Franco, sirva
como argumento en contra que el más viejo de los españoles nacidos tras su
muerte no pasa de 41 años. Y, puestos a comparar, durante la Dictadura, al
menos podíamos comer mientras hoy en Venezuela hay problemas hasta para
limpiarse el culo.
INICIO.
- Si los argumentos en contra de facilitar la Investidura a Rajoy siguen
limitándose a excitar la indignación del electorado con argumentos parciales
que tienen que ver con la corrupción y no con las mejoras en la calidad de la
gobernanza, entonces, seguro, iremos a peor. Las nuevas elecciones se asoman
por el siniestro horizonte del pesimismo nacional. Creo que finalmente PSOE
será consciente de que no es lo mismo estar en contra del PP antes del inicio
del ‘juego’ que estarlo con la ‘competición’ ya iniciada. Seguro que lo hará,
pues es tiempo de ‘coincidencias’ (España necesita gobierno); el de
‘diferencias’ ya llegará. Y no le arriendo ganancias al PP con PSOE y Podemos
en la oposición, sin contar con los de C’s, quienes -advierto- serán los que
peor han de tratar a un gobierno de 137 diputados.
MANDO
TV. - El mango de los carritos de los supermercados, lo teléfonos móviles
ajenos y, sobre todo, la cascaruja de los aperitivos son vectores importantes
de suciedad e infección. Advertido de tal circunstancia, le he tomado respeto
al mando de TV de cualquier hotel de cualquier categoría pues (hipótesis) sería
muy extraño que estando en la cama de un hotel de las estrellas que sean, uno
toque el mando y cualquier otra cosa: consecuencia, mando infestado. Mantengo
(teoría) que, así las cosas, conviene manejar el mando con precaución. Sería
interesante, pues, hacer un estudio estadístico de estas circunstancias a fin
(Tesis) de verificar si es correcto o no lo que supra se expone. (Tal
disquisición es lo que se me ocurre para aclararme respecto a los conceptos
Hipótesis, Teoría y Tesis, pues habitualmente el personal suele confundirlos),
EL
BUEN AFICIONADO. - El buen aficionado al fútbol canta, grita y anima a su
equipo durante todo el tiempo que dura un partido. El buen aficionado no
insulta jamás a los contrarios. El buen aficionado se alegra de que su equipo
gane, y calla, pero, si lo hace con discreción, le es lícito disfrutar cuando
pierde su rival. El buen aficionado tiene preferencia exclusiva por su equipo y
el resto debe esperar, so pena que compita España o cualquier equipo español
frente a otro extranjero. Para el buen aficionado los colores de su equipo son
su bandera. Un buen aficionado es quien se hace socio del Real Murcia. Al buen
aficionado se le permita increpar y faltar al árbitro cuando sus decisiones
perjudiquen a su equipo. Pero, sobre todo, el buen aficionado debe ser educado
con el contrario.
A
LA PORRA 2. - Cuando alguien molesta o no hace lo que queremos que haga, una de
las expresiones que se utiliza para mostrar nuestro desacuerdo tiene que ver
con el mundo militar, concretamente en la vara que usaba el tambor mayor para
marcar el ritmo de la tropa. Una vez llegada al lugar donde iban a montar el
campamento se clavaba la vara o porra en el suelo, justo en el centro del
mismo. Cuando un soldado cometía alguna falta leve se le mandaba a la porra, es
decir, a permanecer de pie junto a la vara hasta que su superior considerase que
había cumplido suficiente “condena” y podía volver con el resto de compañeros.
Hoy, tras 10 meses sin lograr tener Gobierno, alguien debería quedar emplazado
en el centro de nuestra imprecisa Democracia: que se vaya a la porra.
RESPIRO.
- Al examinar las resoluciones habidas por parte del Tribunal Constitucional en
asuntos hídricos, se puede afirmar que la cuestión más relevante de su
laborioso trabajo es la contundencia y contumacia con que han impuesto
criterios jurídicos a fin de deshacer los sucesivos entuertos que los políticos
hemos provocado en el intento de enarbolar la bandera del Agua a desdén de la
normativa en tal materia. Como cuestiones más relevantes, y de cuya observación
se infiere lo que señalo, figuran las sentencias producidas por el Tribunal
Supremo en relación con los intentos de modificación normativa por parte de
Castilla-León y Andalucía, cuyas pretensiones competenciales hacia el Duero y
el Guadalquivir fueron declaradas inconstitucionales, nulas. Cada vez veo más necesario
darle un respiro al Agua y a su carencia de fronteras. Descanse en paz José
Manuel Claver, hombre bueno del Agua.
ARTE.
- Cuando un arquitecto se pone firme y declara su intención de 'trascender', no
quisiera, por lo general, que me encontrara por en medio. Siendo la
Arquitectura un Arte, hoy, su práctica por los arquitectos no deja de ser una
actividad prosaica: ábacos, tablas, programas de ordenador etc. se convierten
en el ‘pincel’ de quienes los utilizan y es que, en realidad, el caminar de la
sociedad deja poco espacio para imaginar. Sí, hay privilegiados (como en
cualquier actividad) que pueden hacer de su trabajo auténtico Arte, pero la
Arquitectura actual tiene poco de eso. Igual pasa con la Ingeniería, donde
algunos, poquísimos, son capaces de elevar a la categoría de Arte diseños que
con su función y fortaleza explotan indiscutiblemente la belleza, aunque la
mayoría no dejan de ser avezados practicantes de monótonos y recurrentes
ejercicios sancionados por la experiencia.
TELE.
- Se debate en la Asamblea de Cartagena el asunto de la televisión regional,
objeto del deseo ideal para las intenciones políticas de unos de quienes ocupan
la Oposición. Siempre, el punto de arranque se sitúa en aquello de que 'el
gobierno utiliza los medios de información pública a su favor', pero lo que se
esconde es ('cree el ladrón que son todos de su condición') obtener supuestas
ventajas políticas de un control político más allá de lo administrativo. Valga
lo siguiente para mostrar mi disconformidad con la pretensión de reforma: todo
funcionario autor de un proyecto siempre estará más conforme con que la Oficina
Técnica supervise su trabajo a que lo haga una comisión formada por políticos
sin formación técnica. No sería bueno confundir el democrático control de la
Asamblea con el que ejercería una parte interesada de modo directo.