HOY
ES MAÑANA.- Negar el poco éxito que el gobierno ha tenido con la corrupción no
merece respeto alguno por mucho que las medidas legales aplicadas resulten
mucho más efectivas que las de todo el conjunto de normas y prevenciones
dispuestas en el transcurso de nuestra democracia. Esto es así, la corrupción
(¡incluidos Eres y Treses por cientos!) penaliza al PP, ¿pero también a todos
los españoles? No. El PP, en lo que realmente importa, esto es, en la creación
de riqueza y su posterior reparto, merece mucho apoyo. Las cosas a su tiempo y
con el orden debido. Por el contrario, el ofrecimiento de repartos que no
prestan atención al crecimiento económico solo serán pan para hoy y demasiada
hambre para mañana. Cánticos teóricos de novedosas sirenas.
JAMÁS.-
Jamás, la presentación de los Presupuestos Generales fue acogida con entusiasmo
por la Oposición. Faltaría más. Nunca. Al contrario, con ocasión de tal
circunstancia los partidos opositores afilan sus intenciones que convertidas en
argumentos, con sus correspondientes lugares comunes, apuntan en la dirección
contraria a la que justifica las cuentas gubernamentales. Los líderes
opositores dicen lo que quieren que digan sus seguidores. Están en su derecho
pero lo cierto es que sus apuntes arrojados tal que dardos envenenados no
conducen al conocimiento objetivo de las cosas. Yo, de ser más
independiente, sería capaz de admitir (o
no) premisas no fundadas precisamente en el exclusivo interés de quien las
expresa. Pero, vaya, tal cosa no sería posible.
CERO
DOS POR CIENTO.- A pique de entrar, una vez más, en el siniestro laberinto de
la escasez de agua, invoco a la Hidráulica, con sus determinaciones más allá
del calendario, a fin de que se compadezca, de nuevo, de quienes habitamos estas
tierras resecas. Al tiempo, pido comprensión de todos acerca de nuestras
limitaciones por razón de clima adverso. Comprensión, sobre todo, para entender
de una vez por todas que los campos de golf –los de Murcia y los de toda la
plural España- en su conjunto, no se sirven de más allá del 0,2 % de lo que la
Hidráulica española es capaz de regular. Esto es así, decir lo contrario es
incurrir en franca deslealtad.
DUDA
CRUEL.- Si bien entiendo que la clase política actual necesita rejuvenecerse
drásticamente (por cierto, ¿entonces qué pinto yo aquí?), no deja de
preocuparme tanta chancla, tanta camisa y tanta coleta en nuestros foros y
parlamentos. Dicho con la sinceridad de quién no percibe nada bueno con tanto
cambio social, tanto apunte de desobediencia civil y tanto cambio de iconos en
calles y plazas. Pero también me inquieta verme convertido en uno de esos
viejos carcamales que se asustaron, allá por 1977, cuando el antiguo régimen se
hizo el harakiri para propiciar el cambio democrático. Esta es mi duda, una
duda cruel.
FUGAZ.-
Lo fugaz de la Vida. Todo un año esperando el comienzo de El Tour y cuando me
vengo a dar cuenta estoy ante el televisor
viendo su final en París. Cuando estrenas coche, eres feliz no más de
diez días sin ver ni una matrícula posterior a la tuya. Al cabo de un mes,
estás algo mosca porque ves demasiadas matrículas más recientes que la tuya.
Tras cuatro o cinco meses, son ya mogollón. Lo peor sucede a los seis meses,
parece que todos los coches son más nuevos que el tuyo. Más en esta coyuntura
por la que pasamos y se matriculan ya un millón de vehículos al año.
Seiscientos mil coches nuevos circulando son una esperanza para España pero una
nota fugaz de lo que es esta vida.
JAMÁS.-
Jamás, la presentación de los Presupuestos Generales fue acogida con entusiasmo
por la Oposición. Faltaría más. Nunca. Al contrario, con ocasión de tal
circunstancia los partidos opositores afilan sus intenciones que convertidas en
argumentos, con sus correspondientes lugares comunes, apuntan en la dirección
contraria a la que justifica las cuentas gubernamentales. Los líderes
opositores dicen lo que quieren que digan sus seguidores. Están en su derecho
pero lo cierto es que sus apuntes arrojados tal que dardos envenenados no
conducen al conocimiento objetivo de las cosas. Yo, de ser más
independiente, sería capaz de admitir (o
no) premisas no fundadas precisamente en el exclusivo interés de quien las
expresa. Pero, vaya, tal cosa no sería posible.
MONTÓN.-
Una victoria resulta pírrica cuando el valor de lo ganado es mucho menor que el
coste de lo perdido (Pirro, en Tarento, ‘“Otra victoria como ésta, y estoy
perdido”). Así las cosas, ya en la actualidad y en nuestro territorio, la
Plataforma Pro Soterramiento ha logrado su propósito: el Ayuntamiento de la
capital deberá pedir la paralización de la Primera Fase de la llegada del
AVE. A tal victoria, amparada por la
multicolor composición de la Oposición municipal le corresponde un futuro
fatal: No veo gobierno posible alguno, ni color oportuno que los oriente, capaz
de proyectar y construir de golpe el soterramiento total de las vías. No puede
ser y, por demás, será imposible. Flaco favor se han hecho los unos y gran
desastre han provocado en los otros, que por cierto somos un buen montón.
RAZONABLES.-
En realidad, mirados con cierta distancia imparcial, y visto lo que hay, los
Presupuestos presentados por el Gobierno resultan ser de lo más razonable.
Pretenden asegurar la línea de crecimiento que el cambio en la situación
económica requiere. En realidad, los índices que se manejan nos dicen que el
futuro (aun a corto plazo) ya no es lo que era. Es mucho mejor. De acuerdo con
ello, son pocas las alternativas posibles. De otro lado, frente a la acusación
que se hace al gobierno de mostrarse claramente electoralista cabe hacer una
(oportuna) reflexión: siempre será más noble ser tachado de ejercer el gobierno
responsablemente que hacer dejación de esta función. Sin más vueltas, la
presentación de los Presupuestos tiene que ver con la responsabilidad de gobernar
y no con determinados intereses partidistas. No todos somos iguales.
VARIABLES.-
El Ayuntamiento de Murcia anuncia un ahorro de 100.000 € al suprimir no
recuerdo qué historias de fotocopias o edición de documentos. Bien está, pero
me da por tomar en consideración a esos invisibles señores y/o señoras que irán
de cabeza al Paro pues, como media, por
cada 50.000 € de inversión pública se genera un empleo. No es necesario
recurrir al aleteo de una lejana mariposa para concluir que nada, absolutamente
nada, es independiente de siniestras variables exógenas. Quién ose en Política
certificar que lo suyo, su propuesta, es absoluta bien pudiera convertirse en
torpe ilustrado cuando no en un irresponsable. Así es que, en todo y más en
política, sentenciar no Podemos.