"Ya hay apuestas sobre cuánto durará en el banquillo popular, ya que está acostumbrado a ser titular en los equipos que ha jugado"
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MIGUEL HERNÁNDEZ VALVERDE.- El candidato popular a la presidencia de la Comunidad Autónoma, al igual que hace Florentino Pérez, presentó días atrás a sus fichajes estrella. Los nombres de Violante Tomás y Agustín Navarrete vienen a cerrar la posible herida abierta en los últimos meses con el descontento claro y patente que existe con muchas asociaciones y ONG, con San Esteban, primer golpe de efecto, Juan Bernal está llamado a volver a poner orden y concierto en una Consejería que vive sus peores y más amargos momentos, segundo golpe, pero sin ninguna duda, Juan Guillamón es al PP lo que Ronaldo al Real Madrid, punto y pelota.
Si la cadena televisiva Cuatro tiene su peculiar personaje Doctor House, nosotros aquí también tenemos nuestro fichaje galáctico, y no porque para algunos esté en las estrellas muchas veces, sino porque es mediático como pocos. Tanto, que dará más de un quebradero de cabeza a mucha gente, incluidos miembros de su nuevo equipo.
Hiriente, irónico, sarcástico, inteligente, suspicaz y trabajador, pero sobre todo buena gente, huye de la mediocridad y la simpleza, rechaza la mentira y odia las medias verdades. Ya hay apuestas sobre cuánto durará en el banquillo popular, ya que está acostumbrado a ser titular en los equipos en los que ha jugado, nadie duda de que no será un simple diputado con brazo de madera, y que no perderá ni un segundo en poner a caer de un burro a cualquiera que argumente sin base, sea rojo, azul o amarillo.
Se equivoca quien piense que se convertirá en el ´Pepito grillo´ de los bancada popular, y también quien crea que será el nuevo ´Ruiz Vivo´, su nivel, al igual que el popular y cabroncete Doctor House, está muy por encima de estas miserias.
Guillamón ´House es así, no se esconderá detrás de ninguna máscara, ni representará ningún personaje en esta obra, seguirá diciendo lo que piensa y pensando lo que dice, y es de ese tipo de gente de los que jode lo que dice y cómo lo dice, pero como parece que todos tenemos un
gen masoquista, gusta lo que dice, eso sí, siempre y cuando sea otro al que ponga en su punto de mira.
Pero al igual que el cabroncete de House, también tiene sus defectos, es políticamente incorrecto (no sé si esto es un defecto o una virtud), se mete en charcos en los que luego se da cuenta que tenía mucho que perder y poco que ganar, y a veces dispara sin tener en cuenta los efectos colaterales, eso sí, le gusta hablar de fútbol y saca su murcianismo en cuanto puede, y menos mal que, aunque no mucho, del deporte rey sabe, no como otros.
En estos momentos en los que los partidos políticos fichan a catedráticos como quien compra en el rastro de Madrid, donde la ortodoxia prima sobre la heterodoxia, es de agradecer esta bocanada de aire fresco que va a traer hasta nuestras mentes apagadas y adormecidas alguna que otra reflexión interesante.
Sólo Begoña García Retegui y Teresa Rosique tienen una dialéctica parecida, seguro que los próximos cuatro años la Asamblea Regional no será tan aburrida y monótona a cómo nos tienen acostumbrados, al margen del apoyo en las urnas, por fin al PSOE le ha salido un ´animal político´ de su nivel.
Si finalmente vuelve a ganar el Partido Popular, no sé qué papel le tiene asignado el futuro presidente, pero tengo claro que Juan Guillamón haría un papel de cine si fuera oposición, sólo le falta el bastón, pero todo se andará.
