Así pues, pasados ya los años suficientes (y en demasía, según mi modesta opinión) llego –y pido adhesiones a tal pensamiento- al punto de considerar nefasto, injusto y perverso al Estado de las Autonomías. En efecto, es muy claro que la mayor ocupación de nuestros políticos se encuentra en preparar (y discutir solemnemente) aquellos asuntos que prefabricadamente tiene la doble característica de defender lo propio atacando al vecino. Se ha creado una competición de 17 autonomías por arte de magia política. Lo que es bueno para una comunidad lo es muy malo para la vecina: ¡ni el álgebra booleana sería capaz de encontrar una solución para esta pérfida unión de individualidades!
Y ahora viene lo mejor, después del ataque inmisericorde que hago de la España Autonómica. El asunto de la Energía Nuclear circula por entre los senderos políticos: ¡sin salir de ellos! Bien sé que lo nuclear tiene mucho de filosofía y credencial suficiente como para definir determinada ideología de izquierdas (como el aborto y el no rotundo a determinadas guerras, no todas) pero alguien deberá expresar la cuestión técnica, más o menos imparcial, de que la energía nuclear dispone de la tecnología mas avanzada y segura (cuenta que le trae) a fin de que el ciudadano no quede embaucado por el dirigismo sectario de unos y otros. Ahora viene Cospedal y dirige un mensaje de descomposición unitaria (¿sería posible que los políticos en vez de provocar problemas dieran solución a algunos de ellos?). Lo que es malo (¡¡¡) para La Mancha debe ir a otro sitio. Pues bien en ese caso lo que es malo para La Mancha es malo para cualquier comunidad. Y lo peor no es esto, es que un almacén nuclear ¡no es malo¡ Ya tiene montado esta señora (iba a decir tonta del pijo, pero no lo digo: sería de mala educación) otro cirio y no Pascual, similar a la que tiene montada con el Agua. Vamos a ver, Sra. Cospedal, ¿usted qué narices es, Secretaria Nacional del PP ó aspirante a dirigir los destinos manchegos? De una vez, determínelo porque con su actuación esperpéntica está a punto de convertirse en enemiga pública del panorama nacional. Por cierto, en esto de la Energía Nuclear, si yo fuera alcalde de un pequeño pueblo de unos 1.000 habitantes solicitaría el apoyo de AMAC en mi firme decisión de traer un ATC de residuos radiactivos: ¡Confío en la tecnología y quiero hacer ricos a mis paisanos! Dicho esto tal cual lo expresa Teresa Domínguez (presidenta del Foro Nuclear): "..supondrá un desarrollo socio-económico para la zona que finalmente lo acoja".
Y, para rematar la cuestión autonómica, me pregunto cómo es posible que la gobernanza de España esté sometida a lo que digan los representantes políticos de las autonomías que están en contra de España, ¿para qué queremos el Senado, cámara destinada a la representación territorial? Al Senado debería limitarse la participación de carácter puramente localista.
Ah, por si faltaba algo, soy de los que creen necesaria la cadena perpetua para determinados delitos, que el desastre hidráulico español tiene un funesto responsable: Zapatero y la derogación del Trasvase del Ebro; me gusta ver los crucifijos y tengo el convencimiento biológico y moral de que un aborto de meses es un crimen. Y si termina el trasvase del Tajo, clamaré por la Abstención. Además, si me acusan de ser de derechas, me importará un pijo.